Dos años después de la tragedia, a través de este libro, Daniela decidió hacer pública su historia y el proceso de recuperación que le ha devuelto la independencia y le ha permitido retomar la vida que pareció detenerse aquel octubre. Cada experiencia, en su camino de superación, es un canto a la esperanza y a la amistad. El amor de su familia, pololo y amigos, meses de hospitalización, varias operaciones, rehabilitación en la Teletón e intensas terapias en el Moss Rehab Institute de Filadelfia, EE.UU., posibilitaron que hoy ella se desenvuelva sin ayuda gracias a modernas prótesis. Actualmente Daniela no tiene límites.
Nunca los ha considerado. "Mis metas siguen siendo las mismas que tuve antes del accidente. Todavía quiero llegar a ser una buena doctora.
Quiero casarme y formar una familia, ser una buena madre. Pero lo más importante, quiero ser feliz. Sé que los caminos que deba recorrer serán distintos a los que tenía planeados, probablemente más largos, pero eso no significa que no llegaré adonde me lo proponga. Sólo tengo que esforzarme". Daniela Garcia